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Cada día, desde hace treinta años, una hilera de instalaciones industriales situadas a orillas del río Delaware libera varios cientos de kilos de partículas nocivas en el medio ambiente circundante. La ciudad de Chester (Pensilvania) lleva el mismo tiempo organizándose contra esta contaminación. Con una población aproximada de 34.000 habitantes, Chester está situada en el condado de Delaware, entre Ridley Creek al norte y el río Delaware al sur. Está atravesada por las autopistas I-95 e I-476, por las que pasan más de 180.000 vehículos al día. Históricamente, ha sido un punto de concentración de industrias debido al declive económico, la disponibilidad de terrenos y una población sin poder adquisitivo predominantemente afroamericana y de clase trabajadora. Estas industrias incluyen instalaciones de conversión de residuos en energía, plantas de tratamiento de aguas residuales y plantas de fabricación cuyas emisiones han aumentado significativamente los riesgos de asma y cáncer en Chester.
En respuesta, los líderes de la comunidad de Chester se unieron bajo la organización Chester Residents Concerned for Quality Living (CRQL) para cerrar una planta de eliminación de residuos y llevar el debate sobre la justicia medioambiental al ámbito federal. Posteriormente, se formó la Asociación Medioambiental de Chester (CEP, por sus siglas en inglés) para reunir a miembros de la comunidad, organismos gubernamentales, representantes de la industria y otras partes interesadas con el fin de abordar las distintas repercusiones de la contaminación del agua y el aire en la salud. El objetivo actual de la CEP es colaborar con Thriving Earth Exchange para analizar los efectos acumulativos de las emisiones de partículas industriales en la salud pública.
El objetivo último del CEP es elaborar un informe en el que se detallen tantas exposiciones como permitan los datos disponibles. Incluiría lo que emite cada instalación, cuánto se emite, la contaminación atmosférica relacionada con el tráfico y cualquier otra fuente. También evaluaría los riesgos de los contaminantes y cómo su combinación está afectando a la prevalencia de afecciones sanitarias específicas. La primera prioridad es recopilar datos detallados sobre todas las fuentes de emisiones para realizar una evaluación acumulativa de lo que está afectando exactamente a Chester. En concreto, el equipo quiere reunir primero datos sobre todas las fuentes conocidas de emisiones (instalaciones u otras infraestructuras),. La Dra. Marilyn Howarth, miembro del CEP y médico laboral y medioambiental de la Universidad de Pensilvania, ayudará en el análisis de cualquier patrón de riesgos para la salud y de cómo incorporar los datos de exposición al análisis.
El proyecto se iniciará de inmediato una vez que encontremos un científico y comencemos las reuniones para esbozar un calendario factible.
Líderes comunitarios
Los líderes comunitarios del proyecto son el reverendo Dr. Horace Strand, de la Chester Environmental Partnership (CEP), y la Dra. Marilyn Howarth, de la Universidad de Pensilvania.
El Dr. Strand lleva más de treinta años trabajando con la comunidad de Chester para bloquear las instalaciones de residuos en Chester y actualmente convoca el CEP para reunir a industrias y comunidades en la resolución de las repercusiones sanitarias de estos peligros medioambientales.
La Dra. Marilyn Howarth es médico medioambiental del Centro de Toxicología Medioambiental de la Universidad de Pensilvania y miembro del CEP. Su trabajo se centra en la justicia medioambiental y el impacto de los contaminantes ambientales.
Becario científico comunitario
Gayatri Girirajan es licenciada en Geografía, Planificación Urbana y Sistemas de Información Geográfica por la Facultad de Ciencias Geográficas y Urbanismo de la ASU. Comenzó su carrera en el Programa Doris Duke Conservation Scholars, donde estudió las intersecciones entre las ciencias medioambientales, la justicia racial y la gestión de recursos en el suroeste del país. Posteriormente, trabajó con el Kyl Center for Water Policy para evaluar las carteras de suministro de agua de las ciudades de Arizona, y con la iniciativa del Grand Canyon Trust para apoyar a la tribu Havasupai en la protección del Gran Cañón frente a la minería de uranio. El sueño actual de Gayatri es ayudar a las comunidades a crear resiliencia frente a los desastres climáticos mediante la restauración de tierras.
Los responsables de la comunidad buscan un socio científico especializado en contaminación atmosférica que pueda recopilar datos sobre emisiones para crear un modelo acumulativo de emisiones en la zona.
Los científicos diseñarán un proyecto para recopilar datos sobre los niveles de partículas y contaminantes atmosféricos peligrosos emitidos por cada instalación con ayuda de la comunidad. Utilizarán sus hallazgos para crear un mapa compuesto de las emisiones colectivas y, a continuación, elaborarán estrategias con los líderes de la comunidad para identificar riesgos concretos para la salud basándose en sus hallazgos. Redactarán sus conclusiones en un informe final.
Competencias y conocimientos deseados.
Thriving Earth Exchange pide a todos los socios científicos que trabajen con la comunidad para ayudar a definir un proyecto con impacto local concreto al que puedan contribuir como voluntarios y colaboradores pro-bono. Este trabajo también puede posicionar a los científicos y las comunidades para buscar financiación adicional, juntos, para la siguiente fase.
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